domingo, 10 de mayo de 2009

Mi Cable a Tierra

Como dice la canción de Fito Páez...he tirado un cable a tierra...no es que haya decidido de un momento a otro hacerlo, si no, que un pequeño ser me ha estremecido, removido y obligado a eso, una pequeña personita que decidió venir a este mundo y crecer dentro de mí...
Creo que aún es difícil de aceptar, aún no puedo creer que tengo otro corazón latiendo dentro de mí...es que no tengo ninguna molestia, no tengo náuseas, no tengo más hambre de la habitual al contrario, no tengo antojos, ni tampoco más sueño de lo normal...pero en fin...sólo sé que él o ella ya reclamó su derecho a estar aquí, y no me sentí capaz de negárselo...no sé si mi conciencia me habría dejado tranquila por el resto de mi vida...sé que todas las mujeres pensamos distinto y sé también que yo era una mujer decidida a no tener hijos, a seguir viviendo mi vida así no más, con algunas pequeñas responsabilidades, viajando y no pensando tanto en el futuro....nunca me lo cuestioné...hasta que llegó él o ella a mi vida...y ahora que lo veo todo formado, con sus pies, manos, y que con tan sólo cuatro centímetros ya se mueve como loco, no dudo de mi decisión.
Sé que fue una situación que podría haberse prevenido, ya que había dejado de cuidarme (el padre del bebé lo sabía), y sólo lo hacía con el método natural... como lo había hecho durante muchos años cuando no tomaba la píldora anticonceptiva...y jamás había pasado nada, a tal punto que llegué a pensar que realmente no podía tener hijos. En fin...esto sucedió cuando un viaje estaba planificado, recorrer centroamérica al lado del hombre que siempre quise...había decidido dar vuelta la página, no sin antes quedarme con un bello recuerdo y paz en mi interior...con la finalidad de comenzar un nuevo rumbo y buscar el amor por otro lado...al final...no hubo viaje, pero sí llegó un nuevo amor a mi vida...las extrañas situaciones de la vida...
No fue fácil asumir, a pesar que ya tengo más de treinta y tantos, dueña de una casa, con un pequeño negocio, y un trabajo estable, aunque contaba con todo eso a favor, no era fácil asumir cuando los objetivos de la vida iban por otro lado, cuando se es independiente y un poco alérgica a la gran responsabilidad de tener un hijo... pero...algo pasó que me hizo girar en 180 grados y quedar mirando hacia otro lado.
Lo terrible era comunicárselo al padre...nada fácil...ya sabía lo que él pensaba al respecto, un hombre soltero, pasado de cuarenta y tantos años, pero alérgico también a los compromisos de todo tipo....lo conocía desde hacía siete años...sin embargo, tenía una pequeña esperanza, no de tener una pareja ahí apoyando, o un amigo incondicional, o un compañero poniendo el hombro o de la persona con la cual has compartido la cama, experiencias y conversaciones durante tanto tiempo... tan solo en ese momento necesitaba un poco de comprensión de ese hombre que tan sólo hacía unos días atrás dijo que también me quería mucho, a pesar de las consecuencias....no quería una relación ni un compromiso, si no, un poco de empatía, de ponerse en el lugar del otro, un gesto que tan sólo podemos tener de vez en cuando los seres humanos....
Sin embargo, su única respuesta como única opción posible fue el aborto....debo reconocer que lo dudé...me aterroricé, pensé en abortar y me pregunté por qué la pastilla del día después no funcionó, los primeros días fueron terribles, tal vez comprendo los cuestionamientos de otros por lo que estoy diciendo, de mujeres que quieren tener un hijo y lloran a mares por no poder lograrlo y no conciben la palabra aborto, pero también...está la otra cara de la moneda, esa que muchas mujeres pasamos, la incertidumbre, el miedo a quedar solas luchando contra el mundo y con un pequeño ser indefenso, a que la vida no será la misma, el miedo a las experiencias emocionales desconocidas...qué!...qué voy a hacer ahora, me pregunté...fue una semana de incertidumbre, llanto, conversaciones con amigos...y conmigo misma, donde tuve que convencerme de la decisión que ya había tomado.... en realidad creo que no lo dudé tanto, inmediatamente mi instinto me dijo que debía hacerme cargo de mi responsabilidad...lo que me hizo dudar, fue el abandono emocional.....ya que en ese momento una mujer se encuentra en un estado emocional demasiado vulnerable.... y debo decir que puede ser fácilmente influenciada.
Finalmente, después de estar triste y llorar durante un mes, decidí darle la respuesta definitiva al padre de mi bebé...su recepción fue la misma y brutal, diciendo además, que yo lo había utilizado y que no lo volviera a molestar nunca más, que tenía ahora una pareja y que era muy feliz, que el bebé era mi cuento...en fin...ese día lloré por última vez y decidí que el día siguiente era el nuevo día de mi nueva vida y no quería tampoco darle desde ya tristezas a este pequeño ser, tampoco era justo y no valía la pena....no sé si será el instinto, o qué, pero fue mas fácil reprogramar mi mente de lo que pensé...claro, no olvido...pero no sufro, y tampoco siento odio por ese hombre, no sé, no puedo sentir rabia tampoco, un poco de pena a veces por él, creo que fue una persona muy carente de cariño y preocupación, en fin esa es otra historia...no es la mía.
Sé que hay muchas mujeres que utilizan verdaderamente este tipo de situaciones y a sus hijos para tener contacto con un hombre al cual quisieron mucho, o no sé...sí que hay mujeres manipuladoras, así como hay hombres canallas, sin escrúpulos, sádicos...pero también sé lo que soy, sé quien soy, sé mis valores sé que jamás tendría la mente tan retorcida como para planificar un embarazo así, no se puede ser tan fría y calculadora en la vida!!! No se juega así con las personas ni con quien viene en camino!!! Es sólo por eso que decidí cerrar las puertas definitivamente, y abrir otras ventanas.
Asi que, ahora, disfruto cada momento, río más que antes, me relajo lo suficiente y nada en mi vida ha cambiado tanto hasta el momento, salgo con amigos y comparto una buena conversación, pero esta vez, sin alcohol y sin cigarrillos...pronto me iré de vacaciones al sur de Chile...a un lugar donde pueda expresar a través de la fotografía mi estar y mi reconciliación con la vida, con las emociones, con los colores y sonidos de la naturaleza...es aquí donde pertenezco, a la tierra, y cómo no...soy ahora una pequeña pachamama, no podría haber hecho otra cosa, no podría haber sido inconsecuente con mi propio pensar, si amo y soy parte de la naturaleza no puedo interferir o destruirla...estoy orgullosa y feliz de mi decisión, por ahora no hace falta nada más en mi vida.
Tú, pequeño capullo has sido mi cable a tierra....